En medio del impacto del ciclón Yaku que azota con fuerza el norte del país, la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC) es cuestionada “porque no realizó trabajos de prevención y protección”. Así, el Gobierno anunció que se creará la Autoridad Nacional de Infraestructura.
Según el presidente del Congreso de la República, José Williams Zapata, se dará celeridad al proyecto de ley que irá en reemplazo de la ARCC.
Al respecto, Karla Gaviño, docente de la Escuela de Gestión Pública de la Universidad del Pacífico, consideró que se debe evaluar si será un organismo adscrito a un ministerio o a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM).
Agregó que, mientras la Autoridad Nacional de Infraestructura se implemente, se tiene que dar paso gradual de funciones de distintas unidades ejecutoras, como Provías, Programa Nacional de Inversiones en Salud (Pronis), Programa Nacional de Infraestructura Educativa (Pronied), entre otros.
En cuanto a la inversión pública subnacional, Gaviño indicó que los proyectos de los gobiernos regionales y locales no será tan simple traspasarlos a una institución del gobierno nacional. “Hay elementos políticos de por medio, entonces, el rol será de acompañamiento asistencial técnico con oficinas descentralizadas”, acotó.
Para no cometer los errores de la Autoridad de Reconstrucción con Cambios, la docente expresó que la entidad tiene que tener empoderamiento, liderazgo y claridad de que se trata de una ejecutora, pero también con rol planificador de proyectos que debe atender.
“Es importante que tenga la mayor autonomía, que sea enfocado en un espacio técnico, y a la vez con empoderamiento para traer a la mesa a ministros, gobernadores regionales, alcaldes, sector privado, entre otros”, afirmó.
Personal calificado
Luego que la Contraloría hallara 845 funcionarios con responsabilidades penales y civiles en la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, Gaviño dijo que la nueva entidad debe contar con el personal calificado en base a criterios tecnocráticos, evitar la alta rotación porque los proyectos tienen una duración prolongada y el cambio de criterios constantes afectan en la continuidad de las obras.
“También será importante la capacidad de la institución para articular con Ceplan, Contraloría, contrataciones del Estado, ProInversión, MEF y más. Una solución más empoderada es que sea una entidad con rango ministerial”, aseveró.
Mejorar estudios
La Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN) cuestionó la propuesta de la Contraloría de la República de crear un Ministerio de Infraestructura, pues esta alternativa “solo crearía mayor burocracia a la que actualmente se enfrentan los proyectos”.
Sin embargo, se mostró a favor de la creación de la Autoridad Nacional de Infraestructura. “Una autoridad de este tipo podría ser una buena oportunidad para cambiar la forma de hacer infraestructura en el país”, puntualizó.
“Esta nueva entidad debe liderar una planificación con ordenamiento territorial e incorporar criterios de sostenibilidad en el desarrollo de infraestructura, mejorando los estudios de ingeniería, el tema de liberación de áreas y simplificando la permisología”, argumentó.
Priorizar proyectos
Por su parte, Javier Correa, exdirector de Promoción e Inversión de ProInversión, manifestó los proyectos que se deben priorizar en la Autoridad Nacional de Infraestructura.
“Un primer punto es el acceso universal del agua y desagüe. Hay otros temas de reordenamiento urbano, electrificación y masificación del gas natural. Además, se tiene que facilitar las comunicaciones entre regiones, con carreteras, ferrocarriles que estén articulados”, subrayó.
En un siguiente nivel, Correa planteó terminar los proyectos de frontera agrícola, como Majes Siguas, Chavimochic, Olmos, Alto Piura, entre otros, que están abandonados.
“¿Dónde quedan los grandes proyectos emblemáticos? Por la conflictividad social, se tienen que revaluar los que tienen impacto social y económico. Si bien los metros tienen gran impacto, la coyuntura de presupuesto escaso obliga a replantearse”, anotó.
