De acuerdo a la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú, al cierre del 2023, las zonas con mayor crecimiento, en cantidad de unidades ofertadas frente al 2022, son Lima Top, Lima Centro y Lima Sur, mientras que Lima Moderna y Lima Top, en conjunto, representan el 71% de las viviendas en venta. Para el primer mes de este 2024, la oferta y las ventas confirman la tendencia, siendo los distritos de Miraflores, Cercado de Lima y Santiago de Surco concentran el 33% de la oferta inmobiliaria en Lima Metropolitana y Callao, donde opera principalmente la inmobiliaria Binda.

Italo Binda, fundador y gerente general de la inmobiliaria Binda, comentó que cerraron el 2023 con una facturación similar al año previo, alcanzando los S/85 millones. Según explicó, este rendimiento se debió a las altas tasas de interés, que frenaron la intención de acceder a créditos hipotecarios. “Las perspectivas son mejores para este año. Quizás en los próximos meses veamos que la tasas se ubiquen en un 7%, como hace dos años”, señaló.

Luego de invertir S/70 millones durante el año pasado, enfocados en la construcción de cuatro proyectos, para este año elevarán el ritmo de inversión hasta un rango entre S/85 millones y S/90 millones, con la meta de vender S/100 millones en departamentos. A la fecha, cuentan con dos proyectos en Miraflores (para entrega inmediata y pre-venta) y dos en construcción, tanto en San Borja como Jesús María.

Nueva cartera de proyectos

A inicios de este año, Binda presentó el proyecto Milano en Miraflores, incorporando 86 departamentos para la venta y se ha trazado la meta de cerrar tres proyectos adicionales entre Lima Moderna y Lima Top antes de finalizar el año. “Acabamos de cerrar un terreno en Paseo de la República y mantenemos negociaciones con otras siete alternativas (terrenos), de los cuales, esperamos concretar dos más”, indicó.

El ejecutivo precisó que la adquisición de un terreno se ha convertido en un reto que tienen que enfrentar, ya que han aumentado su precio y muchos de ellos no están bien ubicados.

Por otro lado, fuera de su tradicional área geográfica de operación, el directivo adelantó a Gestión que, debido a que el ritmo de crecimiento se ha frenado en Lima Moderna y Top, se encuentran analizando la posibilidad de ingresar con proyectos en Lima Norte e, incluso, en Chancay.

“Para esta ciudad, podríamos estar entrando con un proyecto de Techo Propio. Estamos explorando nuevos mercados y tipos de proyectos inmobiliarios para continuar creciendo como compañía. El objetivo es que los encontrar oportunidades de desarrollo que se vendan al 100%, de preferencia, hasta de la entrega del proyecto”, remarcó Binda.

El brazo constructor

La compañía inició hace 30 años como contratista, en su mayoría, de obras privadas, con el boom de las estaciones servicios para grifos. “Esto duró unos cuatro o cinco años. Tras la experiencia que tuvimos al trabajar con empresas transnacionales, empezamos a realizar otros proyectos para compañías variadas, como Exsa, Alicorp, entre otras”, explicó Binda.

Hasta el 2002, continuaron operando bajo ese modelo de negocio, hasta enfrentar una serie de problemas operativos por la coyuntura económica en ese entonces. “Luego de unos años de recuperación, migramos al negocio inmobiliario en 2004, donde solo mantuvimos a la refinería La Pampilla como nuestro único cliente de la división constructora”, explicó.

En total, el brazo constructor aporta el 15% de la facturación anual de la compañía. “Principalmente, seguiremos enfocados en el negocio inmobiliario, así que no estamos buscando nuevos proyectos como constructura; sin embargo, si salen nuevas oportunidades, estamos abiertos a evaluarlos”, dijo.