La Cámara de Comercio de Lima (CCL) advirtió sobre la grave paralización de obras públicas a nivel nacional debido a la negativa del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de transferir fondos a la Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN). Esta situación pone en riesgo inversiones ya ejecutadas, miles de empleos, y proyectos clave de prevención frente al Fenómeno de El Niño.
Raúl Barrios, vocero del Gremio de Construcción e Ingeniería de la CCL, manifestó su preocupación en una entrevista con RPP, al señalar que la falta de financiamiento ha detenido completamente las operaciones de la ANIN. Según indicó, esta decisión del MEF no solo genera sobrecostos y amenaza con llevar a la quiebra a muchas empresas, sino que además compromete vidas humanas al interrumpir obras de infraestructura esenciales.
Pese a que en un inicio la CCL mostró reservas frente a la creación de la ANIN, el gremio ha reconocido su eficiencia en la ejecución presupuestal. En 2024, la entidad logró ejecutar el 98 % de su presupuesto, alcanzando los S/ 5,200 millones. Barrios afirmó que “efectivamente estamos viendo que funciona”, destacando además el respaldo técnico que recibió la ANIN del gobierno británico.
Durante abril de este año, la ANIN representó el 32.1 % de toda la inversión pública ejecutada por el Gobierno Nacional, superando ampliamente a ministerios, gobiernos regionales e incluso a entidades como Sedapal. Para el año 2025, la institución contaba con un Presupuesto Institucional de Apertura (PIA) de S/ 3,131 millones, lo cual solo le permitió operar hasta mayo. Aunque solicitó un total de S/ 6,000 millones, el MEF entregó apenas la mitad en enero, y finalmente decidió no transferir los S/ 3,000 millones restantes en junio, sin previo aviso.
Este corte de financiamiento tomó por sorpresa a la ANIN, que siguió iniciando obras durante junio y julio bajo la presunción de que los fondos llegarían. Como resultado, numerosos proyectos ahora se encuentran paralizados, y las empresas contratistas no han recibido pago por los trabajos realizados durante esos meses.
El impacto ya se refleja con fuerza en el sector. Según la CCL, al menos 3,000 trabajadores han sido despedidos, y se estima que más de 20,000 podrían perder sus empleos si la situación no se revierte. Empresas pequeñas y medianas, especialmente en provincias, están siendo duramente golpeadas. Barrios reveló que una obra con un 95 % de avance fue detenida a solo 10 días de su finalización, dejando a 800 personas sin empleo.
Las consecuencias se extienden también a nivel económico y de gestión pública. La interrupción de obras ejecutadas desde 2019 para mitigar el impacto del Fenómeno de El Niño —en regiones como Ica, Tumbes, Piura y Chiclayo— podría significar la pérdida de entre S/ 200 y S/ 400 millones ya invertidos, si las estructuras inconclusas son arrasadas por las lluvias. Además, reactivar estas obras en 2026 implicaría un gasto adicional de S/ 90 a S/ 100 millones, debido a la movilización de maquinaria, reinstalación de campamentos y contratación de nuevo personal.
Otro efecto colateral es la pérdida de confianza en la ANIN como entidad contratante. La falta de pagos genera una reputación de “mal pagador” que afecta su imagen ante bancos y aseguradoras, lo que incrementará los costos financieros y los seguros en futuras licitaciones. Muchas empresas que han utilizado mecanismos como el factoring para financiarse podrían enfrentar graves problemas si no reciben los pagos a tiempo.
La situación también representa una contradicción con el discurso del Gobierno central. La presidenta ha prometido una inversión de US$ 8,200 millones en obras públicas hasta 2026 y ha buscado atraer inversión extranjera. Sin embargo, la incertidumbre actual desalienta a empresas extranjeras —incluidas firmas de Paraguay, Uruguay, Argentina y Europa— que llegaron al Perú para participar en proyectos públicos. Barrios cuestionó: “¿Tú crees que viene una empresa japonesa cuando el gobierno está haciendo perro muerto?”.
Ante este panorama, la CCL ha solicitado al MEF que, de forma inmediata, asigne mayores recursos a la ANIN para culminar los proyectos vigentes y sostener su cartera de inversiones futuras. En caso no se concrete esa ampliación, al menos exigen que se transfieran los fondos necesarios para cubrir los trabajos ejecutados entre junio y julio.
La CCL también hizo un llamado al MEF a tomar “acciones urgentes y estratégicas para no comprometer el desarrollo del país ni la generación de empleo”. La falta de decisión financiera, subraya el gremio, podría tener repercusiones económicas y sociales severas a corto y mediano plazo.
En paralelo, la Cámara Peruana de la Construcción (CAPECO) también se pronunció sobre la suspensión de obras a cargo de la ANIN. A través de un comunicado, expresó su preocupación por la falta de presupuesto para continuar proyectos públicos, en especial aquellos enfocados en prevenir desastres por El Niño. CAPECO advirtió que no se pueden seguir anunciando nuevas obras para 2025-2026 si no se resuelve el déficit actual de S/ 3,702 millones y exhortó al MEF a garantizar el financiamiento necesario para culminar las obras en ejecución.