El 18 de febrero, Rafael López Aliaga, alcalde de Lima, visitó la zona de La Grama en Puente Piedra para colocar la primera piedra de un pozo de agua que busca beneficiar a miles de personas en la comunidad. Durante la ceremonia, López Aliaga acusó al alcalde de Puente Piedra, Renán Espinoza, de bloquear la realización de esta obra debido a trámites burocráticos. Además, denunció penalmente a Espinoza por oponerse a llevar agua a las personas más necesitadas.
Sin embargo, después de una semana, la situación dio un giro positivo. El propio López Aliaga anunció que había obtenido un documento clave que le permite continuar con los trabajos. Este documento fue entregado por la Autoridad del Agua (ANA), lo que autoriza a la Municipalidad de Lima a seguir adelante con la construcción del pozo de agua en la zona de Floresta de Copacabana y las tres etapas de La Grama.
Durante una ceremonia en la Municipalidad de Lima, López Aliaga destacó que la obra no solo incluye la excavación de un pozo de 120 metros de profundidad, sino también la construcción de una loza deportiva y un parque completamente adecuado. El alcalde aprovechó la ocasión para exigir a las áreas legales de su comuna que tomaran acciones contra Renán Espinoza por impedir el progreso de este proyecto, que beneficiaría a miles de vecinos de Puente Piedra.
López Aliaga calificó de inaceptable la oposición de Espinoza, calificando de «violación a los derechos humanos» el obstáculo que se le está poniendo a un proyecto que tiene como objetivo garantizar el acceso al agua potable. «Le pido a la gerencia legal, a la procuraduría municipal, que defiendan el derecho fundamental de la vida», señaló durante su discurso.
En su crítica, el alcalde de Lima no dudó en arremeter contra el burgomaestre de Puente Piedra, sugiriendo que las acciones de Espinoza podrían estar motivadas por intereses personales. «Ver a un tipejo poniendo todos los obstáculos para que la gente no tenga agua me lleva a pensar mal. ¿No será que está cobrando por llevarles agua en cisternas?», agregó, mostrando su desconcierto ante la actitud del alcalde de Puente Piedra.
A pesar de las controversias, Rafael López Aliaga reafirmó su compromiso de seguir adelante con la construcción del pozo de agua en La Grama, destacando la importancia de la obra para mejorar las condiciones de vida de los habitantes de la zona y garantizarles el acceso a un recurso vital.